VW Golf II GTI (1984-1991)
El GTI se moderniza, pero mantiene el ADN de la primera generación. Esta transición fue sumamente importante para la historia de este modelo, porque eso es lo especial del Golf: que siempre ha sido una evolución del original. El GTI crece en tamaño (14 centímetros más largo), pero mantiene sus características básicas de diseño y todos los elementos que enriquecen a la versión deportiva del Golf y que ya se convierten en clásicos. El interior gana en tamaño y cuenta con un diseño más moderno y elementos como un completo ordenador de a bordo.
Con una carrocería reforzada, en el chasis se ajustan los amortiguadores, estabilizadoras, dirección y frenos, para convertirlo en un modelo más cómodo y polivalente, sin afectar sus dotes deportivas.
Tan solo un año después desde su llegada al mercado, el GTI se renueva con dos faros adicionales para las luces largas, y líneas rojas recorriendo las tiras protectoras laterales y los parachoques.
En 1986 se introduce el catalizador en determinados mercados, lo que provoca que la potencia se reduzca a 107 CV. Ese mismo año nace el Golf GTI 16V, con un motor con culata de cuatro válvulas por cilindro que entrega 139 CV (129 CV en los catalizados), con el que este modelo conseguía acelerar de 0 a 100 km/h en 8,5 segundos y registrar una velocidad máxima de 208 km/h. El GTI 16V se diferenciaba por unos sutiles emblemas con la grafía ‘16V’ en la parte delantera y trasera; el spoiler delantero más prominente, un sistema de escape de tubo y un velocímetro cuya escala llegaba hasta los 260 km/h.
El GTI recibe en 1989 un pequeño restyling, con ‘paragolpes anchos’, que los seguidores del modelo valoraron mucho con el paso de los años. Un año después nace la nueva variante G60, con inyección electrónica y compresor G-Lader, que era capaz de proporcionar una buena cantidad de sobrealimentación. Con 160 CV y unos impresionantes 225 Nm de par disponibles a partir de sólo 3.500 rpm, el Golf GTI G60 pasaba de 0 a 100 km/h en 8,3 segundos y alcanzaba una velocidad máxima de 216 km/h. Este aumento de prestaciones trajo consigo una mejora en el equipo de frenos y la inclusión en el equipamiento de serie del ABS.
En noviembre de 1990, el GTI alcanza el millón de unidades producidas. Entre 1984 y 1991 se fabricaron un total de 628.000 VW Golf GTI de segunda generación.